SANTIAGO DE MENS, MALPICA



El monasterio de Santiago de Mens, próximo a las TORRES del mismo nombre, es un edificio religioso, del que sólo queda una iglesia con significativos restos románicos, declarada Monumento Nacional.


Su origen, puede remontarse a los siglos X (durante el obispado de Sisnando) o XI (hay noticias de su abad Recamundo a partir del año 1078). Recamundo hizo de notario en una escritura de donación de la villa Nemenio, realizada por Pedro Froilaz de Traba al monasterio de San Tomé de Nemeño. Una inscripción dedicatoria, con caracteres en relieve, señala la era 1172, que correspondía al año 1134. Fue priorato del monasterio benedictino de San Martiño Pinario en el año 1499, después pasó a depender de la COLEGIATA DE A CORUÑA. Según recoge Jerónimo del Hoyo, en el siglo XVII aún conservaba el claustro y los aposentos de la comunidad. En la actualidad tan sólo se conservan dos restos toponímicos que nos hablan de la antigua presencia de este monasterio y de sus moradores: La Eira do Mosteiro y el Río dos Píos.




Se considera una construcción heredera de la etapa final del arte prerrománico asturiano promovido por el rey Alfonso III (866 - 910), cuyos máximos exponentes quedan reflejados en:
 S. SALVADOR DE VALDEDIÓS;...



... SANTO ADRIANO DE TUÑÓN;...



 SANTIAGO DE GOBIENDES y S. SALVADOR DE PRIESCA, todas en Asturias. La arquitectura asturiana también dejó numerosos ejemplos en Galicia durante el siglo X: La 2ª CATEDRAL PRERROMÁNICA  DE SANTIAGO (DESAPARECIDA); SANTA MARÍA CORTICELA, hoy unida a la Catedral; SANTA MARÍA DO CEBREIRO;
 SAN PEDRO DE ANSEMIL;...



... FRANCELOS,... 



...ATAN Y CATOIRA.


En ella observarás huellas de sus tres fases de construcción. De la primera, prerrománica, se conserva la estructura basilical con tres naves divididas por pilares cuadrados con impostas y el sistema de cubrición en madera; elementos todos ellos de marcada  influencia asturiana. 



De la época románica se mantienen la cabecera,...


... la puerta sur... 


...  y el muro norte.


De la última fase, de estilo barroco, es la remodelación de la fachada principal, con cuerpo central destacado sobre los laterales, con puerta adintelada, rematado en campanario de proporciones esbeltas, terminado en una linterna gallonada, sostenida por pilastras jónicas. Los laterales están rematados en pináculos.




La PORTADA ROMÁNICA de la fachada sur, arrimada a la sacristía, que la oculta desde muchos puntos de vista, está formada por un arco de medio punto liso que se apoya sobre un par de columnas acodilladas con capiteles de decoración vegetal y sin bases, seguramente ocultas bajo el pavimento actual. Rodea el arco una arquivolta decorada con billetes formando el típico ajedrezado.


Los ÁBSIDES conservan todavía su primitiva imagen románica. En el central se abren tres ventanas con arcos de medio punto.


Las semicolumnas que dividen el ábside están coronadas por capiteles de decoración vegetal,...



... excepto la correspondiente a la columna de la derecha del hueco central, que presenta un original y sobrecargado conjunto. 



La REPRESENTACIÓN DE UNA ESCENA DE JUGLARÍA es única, clara y fácil, en la que se ven tres personajes. El de la derecha toca una fídula con el arco que maneja en su mano diestra y coloca sus desnudas piernas en una extraña postura. Tan insólita disposición debía formar parte de su actuación. 



 La figura que le sigue ocupa el centro de la pieza, muestra desnudas las piernas y las nalgas y extiende ante su cuerpo, con el que realiza una inverosímil torsión, una larga cartela que sostiene con las manos. El tercer intérprete parece estar sentado, tiene también las piernas desnudas y sobre ellas extiende una cartela que agarra con sus manos. La erosión sufrida por el granito, no impide reconocer el carácter festivo o jocoso de la escena.


La presencia de contorsionas y acróbatas en diferentes posturas, desnudos y mostrando impúdicamente sus genitales, reforzaría el mensaje negativo que sobre los juglares parece querer transmitirnos el maestro de Mens, que reforzaría los contorsionistas labrados en los CANECILLOS del templo; las posturas y otros detalles pueden variar, pero todos exhiben su sexo.






 


Son también notables los canecillos decorados con motivos geométricos, antropomorfos, animales y vegetales.








Otra colección de 12 canecillos y dos inscripciones que datan la construcción románica, se encuentran en el muro norte, la parte más vieja de la iglesia.









Ya en el interior, destacan las pinturas; los capiteles decorados con exuberante decoración vegetal y otro con dos leones en actitud agresiva; la imagen de Santiago peregrino medieval en madera policromada (su situación original era la CAPILLA DEL ESPÍRITU SANTO) y una ARA precristiana en el altar del ábside sur (sus márgenes están delimitadas por un marco de tres líneas esculpidas. La superficie donde se encontraría la inscripción, fue pulida cómo signo de cristianización).


Una LEYENDA nos narra que existe un pasadizo entre el CASTILLO y la iglesia románica, aunque nunca se pudo demostrar su existencia. Nos dicen que el conde había raptado a una hermosa joven de la aldea y la tenía presa en el castillo. Los aldeanos asaltaron el castillo y el conde tuvo que huir por el túnel. Para que no escapara, los asaltantes le prendieron fuego en las dos bocas. Desde entonces el trigo y el maíz que nacen arriba de este paso subterráneo amarillecen más pronto debido a la maldición pasada.


En el entorno, además de algunos hórreos,...







... observamos un estupendo CRUCEIRO con la plataforma enterrada, pedestal cuadrangular achaflanado y mesa de altar o posadouro pegado. 



Tiene un varal octogonal que comienza y finaliza en cuadrado. Lleva un capitel cuadrangular moldurado con figuras geométricas. Su cruz es cuadrangular, recrucetada y con los brazos en chaflán.


En el anverso de la cruz presenta a Cristo Crucificado con tres clavos y las manos abiertas. Inclina la cabeza hacia la derecha con una corona de espinas y una cartela con las siglas INRI. Su paño de pureza va con doble nudo.


Por el reverso de la cruz queda la Inmaculada coronada y con las manos juntas con la luna a sus pies.


Este y otros interesantes elementos patrimoniales podemos visitarlos siguiendo la RUTA DE SANTISO A MENS. Un recorrido de 5,14 km. (ida); con una duración aproximada de 1,26 h; recomendable para realizar a pie, en bicicleta o en coche; y en cualquier época del año.


INFORMACIÓN RECOGIDA DE LOS SIGUIENTES ENLACES







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