Es un ayuntamiento de interior en el que disfrutar de algunos de los espacios naturales más espectaculares de la COMARCA DE PONTEVEDRA (enlace a nuestra publicación); de interesante arquitectura religiosa, civil y etnográfica, de numerosos yacimientos arqueológicos, así como de fiestas y tradiciones únicas.
La joya patrimonial de Barro es la iglesia de SAN MARTIÑO DE AGUDELO (enlace a nuestra publicación), uno de los ejemplos de románico gallego mejor conservados de la comarca, construida a finales del siglo XII o principios del XIII, en pleno auge del estilo románico en Galicia.
Muy cerca se encuentra A CHAN DO MONTE GÜIMIL, un antiguo castro que fue en su momento uno de los más grandes del suroeste de Galicia y muy cercano a otros yacimientos como el de O Castelo de Agudelo o el de Monte Redondo. Además de innumerables fragmentos de cerámica, así como de molinos y otros restos prehistóricos, se encontró de forma accidental la cabeza de una escultura castreña que representa un guerrero, y que ya se encuentra en el MUSEO DE PONTEVEDRA.
Sobre la croa del Castro, que muestra unas excepcionales vista, se encuentra la capilla dedicada a San Cibrán, cuya romería tiene lugar en Julio, además de una amplia área recreativa.
Uno de los lugares imprescindibles y más hermosos que visitar en Barro es el PARQUE DE LA NATURALEZA DEL RÍO BAROSA (enlace a nuestra publicación). Este singular complejo natural y etnográfico tiene por su mayor exponente la FERVENZA DE MAQUIEIRA, de 30 metros de desnivel y los diecisiete molinos de agua que acompañan su caída.
La PR-G 105 SENDEIRO DOS MUÍÑOS DE BAROSA, ruta de senderismo de dificultad media permite descubrir no sólo los distintos molinos reconstruidos, sino también conocer la amplia biodiversidad del entorno, con un bosque típico de ribera y una rica variedad de musgos, algas y helechos.
La IGLESIA DE SAN BREIXO, ubicada en el alto de una colina y rodeada de una gran llanura, favorece la celebración de una de las más importantes romerías de la comarca: la ROMERÍA DE SAN BREIXO, que se celebra el primer domingo de octubre. Existe constancia del culto a este santo de origen portugués desde el siglo IX, pues se halló un registro del año 896 en el que consta un donativo que hicieron siete hermanos. Fue una importante donación a este templo que, segundo consta, había erguido su abuelo cien años atrás. Convirtiendo esto en uno de los cultos cristianos más antiguos de Galicia. Lo más posible que este enclave fuera ya un lugar de culto precristiano, pues hay catalogado un castro a escasos metros. Después, ya en la Edad Media, se levantaría el templo cristiano, ya que era costumbre cristianizar aquellos lugares relacionados con cultos paganos.
La iglesia sofrió distintas reformas y ampliaciones. El 13 de diciembre de 1893, segundo relata D. Jesús Gago Blanco, un rayo derribó la torre de la iglesia, las campanas y el primer cuerpo de la cubierta, justo dos años después de haber sido renovado el armazón del tejado. Circularon por la parroquia y aledaños distintas LEYENDAS sobre las campanas: una decía que estas habían sido fundidas por el rayo, otra que salieran despedidas y que habían finalizado enterradas en A Barosa y otra que relata como una campana voló hasta dar con una piedra, piedra de la que comenzaría a brotar el agua de la fuente de San Breixo. Lo cierto es, que existe documentación que acredita que las campanas fueron fundidas y que el párroco ingresó 720 pesetas por ellas, dinero que empleó para pagar parte del coste de la reconstrucción de los elementos dañados, un coste que ascendió a un total 5.465 pesetas.
Reconvertido en un espacio para la cultura y lugar de celebración de las numerosas fiestas y eventos que llenan la programación de Barro, el PAZO DA CREGA es un interesante monumento, edificado en el año 1611 por Diego de Castro y Soutomaior y su mujer María Rodríguez y Bermúdez. Con la configuración típica de una gran casona gallega, el edificio fue rehabilitado en 2008 para recuperar su belleza en piedra. En una fachada que da al patio interior se observa el escudo familiar con las armas de los Vilar de Francos, Gil, Castro y Caamaño.
El espacio cuenta con distintos elementos tradicionales, como un canastro, un cobertizo, un depósito de almacenamiento de agua y una bonita capilla en honor a San Antoniño. En la heráldica inscrita en la fachada de la capilla se encuentran las mismas casas representadas que las del escudo del Pazo, además del escudo de los Mosqueira y el emblema eclesiástico de la palma y la espada.
Ubicado en lo que hoy conocemos como la carretera N-550, el LEGUARIO DE PERDECANAI pasa totalmente desapercibido para la mayoría de viajeros. Esta extraña curiosidad fue levantada en el siglo XVIII para marcar en leguas una red de caminos que partía de Madrid y comunicaban distintas poblaciones.
Este curioso poste de granito con forma piramidal, se ubicaba en el Camino Real que unía Santiago con Pontevedra. Marcaba una distancia cercana a los 7 kilómetros, lo que nos permite conocer lo que por aquel entonces podía recorrer una persona en esta zona en tan sólo una hora (a caballo). Y contaba con su propio reloj de sol, que sigue marcando desde entonces las horas para quien por allí pasa.
De los 6 leguarios que se conservan en el antiguo trazado, tres de ellos se encuentran en Terras de Pontevedra: este de Perdecanai y otros dos, uno en Vilaboa (Figueirido) y otro en Cerponzóns (Pontevedra).
Además, cerca del leguario se encuentra Santa María de Perdecanai, en cuya iglesia se puede visitar una CAMPANA BICENTENARIA, y no muy lejos de ella, el CRUCEIRO DE TRIABÁ, del siglo XIX y con una peculiar serpiente enrollada, que fue mencionado por Castelao en su libro “Cousas”.
También destacado es el PETO DE ÁNIMAS DE PORRÁNS. Estos elementos típicos de Galicia y Portugal constituyen una manifestación material del culto a los muertos y las ánimas (almas que están en el purgatorio). Suelen tener un cajón para limosnas con la intención de favorecer el paso de las ánimas del purgatorio al cielo, aunque en este caso sólo se conserva el hueco. En este sobresale un Cristo acompañado por San Francisco a su derecha y la Virgen del Carme a la izquierda. De la cuerda que sujetan los dos, aparecen cinco ánimas que intentan liberarse del fuego que las atormenta. El retablo de piedra, estaba antiguamente pintado en ocre.
En el conocido como Monte Bazar se encuentra una interesante ruta señalizada de 3 kilómetros de longitud (circular) en la que se pueden visitar tres enclaves con muestras de arte prehistórico de gran valor patrimonial, insertadas en su entorno natural. Siguiendo los carteles, desde el campo de fútbol, a través de una pista forestal, el camino nos lleva a los grabados de PEDRA MIRTADA, OUTEIRO DO CODESO y CASTRO LOUREIRO, que se caracterizan por sus motivos geométricos de círculos concéntricos, líneas y “coviñas” (cazoletas), uno de los motivos más comunes del arte rupestre gallego.
Existe un conjunto de sitios que, por su valor arquitectónico, social o patrimonial, también merecen atención por parte de las personas que visiten Barro. Entre ellos, la CASA DA TORRE en el lugar del Pazo, la PEDRA DO HOME o el MOLINO DE VIENTO en Triabá y el MIRADOR O PINO MANSO en el monte Acibal.
Mención especial requieren las CAPILLAS, pequeñas y encantadoras, que pueden encontrarse dispersas en la geografía de Barro: San Amaro, As Virtudes, Santo Antoniño o la de Búa.
El de Barro, es sin duda uno de los tramos más bellos del CAMINO PORTUGUÉS a su paso por la provincia de Pontevedra y constituye una imprescindible ruta de senderismo para aquellos que quieran descubrir los paisajes más tradicionales del ayuntamiento (ríos, cruceiros, bosques autóctonos, viñedos, pequeñas aldeas y el cercano Parque de la Naturaleza del Río Barosa y su magnífica cascada).
El recorrido del Caminno por Barro coincide con la Vía XIX, una de las arterias de circulación de la Gallaecia romanizada, así, en la parroquia de Portela, aun se conserva parte de la original calzada romana.
Por último, durante la segunda mitad de Junio, Barro celebra una popular FESTA DO VIÑO DE BARRO, que ya supera las 40 ediciones. En ella, los productores locales presentan sus caldos Caíño y Albariño de la denominación de Origen Rías Baixas, en un importante certamen enológico. La fiesta va acompañada de numerosos actos culturales, musicales y deportivos, así como eventos gastronómicos en los que probar lo mejor de la gastronomía gallega con una importante “sardiñada”.
Foto de la página: https://www.paxinasgalegas.es/fiestas/festa-do-vi%C3%B1o-barro-42.html |
Casaley, Viña Moraima, Cabana dás Bolboretas e Adegas do Rexurdir son las cuatro bodegas do municipio de Barro que elaboran vino al amparo de la D.O. Rías Baixas.
TODA LA INFORMACIÓN INCLUIDA EN ESTA PUBLICACIÓN, HA SIDO RECOGIDA DE LOS SIGUIENTES ENLACES:
https://terrasdepontevedra.org/es/imprescindibles/que-ver-en-barro/
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Os espero en las próximas entradas y disfrutad del BLOG:
Un saludo de Mónica, Laura y Alberto.
Otro gran y precioso reportaje que me ha encantado, me lo apunto para el próximo viaje. Estoy esperando mí recuperación de mi operación de prótesis de rodilla. Un abrazo.
ResponderEliminarBuenas tardes Teresa! Espero que ya estés totalmente recuperada, pues hoy en día ese tipo de operaciones ya no son tan complicadas. Y me alegro mucho que te gustase la publicación. Un abrazo fuerte!
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