Se dice que fue mandada construir por Fernán Pérez de Andrade “O Boo”, a
finales del s. XIV. Tiene nave rectangular con techumbre de madera a dos
vertientes y profusión de canecillos lisos en el tejaroz.
En el tímpano, de directriz apuntada, aparece el escudo de los Andrade,
en cuya bordura va la leyenda consabida, en letra gótica, y a los lados un
jabalí y un lebrel en actitud de persecución. Destaca la falta de banda en el
escudo, en todo caso, tal ausencia ya se advierte, por igual, en otros escudos
del caballero que ornan la iglesia de SAN
FRANCISCO DE BETANZOS.
SAN FRANCISCO DE BETANZOS |
Los de Riobarba y Santa María de Cabanas
constituyen dos importantes testimonios de tímpanos heráldicos dada su
infrecuencia en Galicia. Aunque se encuentren en la iglesia compostelana de San
Benito do Campo y en Santa María da Franqueira (A Cañiza, Pontevedra),
fechables en la primera mitad del siglo XIV, en ambos casos el escudo se
presenta como motivo marginal. Más en obras
algo posteriores a las de Montes do Sor, ordenadas por el arzobispo
compostelano Lope de Mendoza, la heráldica adquiere protagonismo; así, el
dintel de la portada principal de SAN
MARTIÑO DE NOIA (año 1434) y del que fuera ingreso a la capilla del
prelado en la CATEDRAL DE SANTIAGO (año 1451), mudado de lugar, exhiben
las armas de éste, flanqueando a las de Castilla y León en el primer caso, y en
el segundo sostenidas por ángeles.
SAN MARTIÑO DE NOIA |
Dibujos geométricos decoran las mochetas. Sobre altos retallos, un par de
columnas acodilladas por cada lado en capiteles de hojas y animales fantásticos
en actitudes retorcidas. La puerta de entrada es adintelada y sin adorno
alguno, aunque es fácil suponer que en la reforma del s. XVIII la puerta
original, de arco ojival, se colocó en la sacristía para que sirviese de
hornacina a una imagen. El arco triunfal tiene astrágalo además de la imposta.
Más reducido en ancho y largo el presbiterio, pero a la misma altura que la
nave y con modillones idénticos en el tejeroz. Tanto los ventanales del ábside
como los de la nave fueron ampliados en reformas posteriores.
La decoración heráldica se distribuye también por el interior de los
laterales de la iglesia. En Riobarba, los escudos se elevan hacia la línea
imaginaria que marcan los dinteles de las ventanas. Aunque únicamente podamos
ver dos ejemplares enfrentados a uno y otro lado de los extremos orientales de
la nave, se tiene conocimiento de la existencia de una nueva pareja enfrentada,
oculta hacia el extremo occidental. Una combinación idéntica se aprecia en uno de los
estribos absidales de SAN
FRANCISCO DE BETANZOS, donde un escusón de medio punto se incluye en un
escudo de punta aguzada.
SAN FRANCISCO DE BETANZOS |
Uno de los elementos que cohesiona a las tres iglesias, fundadas por Fernán
Pérez de Andrade, en Montes do Sor (Riobarba; Santa María y San Pantaleón de Cabanas),
es la FIGURA DEL JABALÍ, en todos los casos desplazados de su posición original.
En los ángulos superiores de la fachada del pórtico de Riobarba, se conservan un cordero con la
cruz lobulada...
... y un jabalí aparentemente erguido, pensándose que sobre el
lomo llevase otra cruz, elementos ornamentales y simbólicos que antes
estuvieron en los piñones de la nave.
Los jabalíes de Montes do Sor miden un promedio estimado de 0,98 metros
de longitud, asimilándose al de MONTEFARO
(0,96),...
siendo algo inferiores al de NARAHÍO (1,20) y sobre todo al
ejemplar del MONUMENTO
BETANCEIRO DE “O BÓO” (1,63).
Preside el hastial, una hornacina de vieira con una escultura pétrea de
San Pablo con libro y espada.
El pórtico es ya obra del s. XVIII, como lo demuestra la inscripción: “YZOSE SDO. CVRA ANT. DNEZ. AÑO 1736”,
situada bajo la hornacina.
Sobre estas, una espadaña de dos vanos con coronamiento redondeado.
En el costado meridional de la nave un pórtico cubierto o cabildo con
vanos protegidos por un enrejado de madera.
El retablo principal, de estilo rococó, con tres hornacinas en el cuerpo
principal y un relieve de San Pablo en el ático, es obra de un buen entallador
del último tercio del s. XVIII.
En el ajuar litúrgico destaca una cruz parroquial de plata, con tres
abultamientos en la cebolla, el Cristo en el anverso y San Pablo en el reverso,
y el punzón VARELA, sin duda el platero del mismo nombre que trabajó en
Mondoñedo a comienzos del s. XIX.
INFORMACIÓN RECOGIDA EN LOS SIGUIENTES ENLACES
LA MEMORIA DE FERNÁN PÉREZ DE ANDRADE O BÓO EN LAS IGLESIAS DE MONTES DO
SOR: SAN PANTALEÓN DE CABANAS, SANTA MARÍA DE CABANAS Y SAN PAULO DE RIOBARBA. Pdf