Estas figuras, fueron denominadas bebedores o borrachos e
interpretadas como sátiras de la embriaguez y la gula. Sin embargo, según un
estudio reciente, estas esculturas tienen ninguna intención moralizante.
Son
representaciones reales de un antiguo instrumento musical medieval, ampliamente
representado en nuestras iglesias romanicas, un tipo de aerófono que
dejó muy pocas huellas históricas. El instrumento, totalmente desconocido hasta
hace pocos años, fue identificado por el historiador y musicólogo Faustino
Porras Robles, especialista en representaciones musicales en el arte
románico, quien en 2007 publicó un trabajo sobre este asunto en
la Revistade Folklore que edita la Fundación Joaquín Díaz. Porras
Robles dio a este instrumento, cuya denominación original se desconoce, el
nombre de DOLIO (del
latín dolium o tonel).
Este instrumento constituye un verdadero
descubrimiento ya que no aparece documentado en ninguna fuente, literaria o
iconográfica, de este momento o posterior. Se trata de un aerófono que, por su
forma, ha sido considerado, erróneamente, como un verdadero tonel de vino
(alusión o crítica a la bebida inmoderada, igual que se hacía con cualquier
otro vicio); como hemos indicado en su momento, ello pudiera ser así cuando la
figura porta el tonel sobre su espalda (analogía del vicio con una carga
difícil de soportar), pero no en las demás ocasiones; la disposición de los
labios y los dedos de determinadas representaciones, especialmente las de la
catedral de Lugo y la de Miñón (Burgos), y el hecho de que aparezca siempre en
contextos musicales o dancísticos, confirma, sin embargo, que se trata de un
instrumento de viento.
Está formado por un cuerpo de gran tamaño casi
cilíndrico aunque en algunos casos puede ser elíptico o prismático con aristas
redondeadas; en la parte superior presenta una pieza que actúa a modo de pico o
boquilla y que, con toda probabilidad, contaría con un bisel posterior
encargado de producir el sonido.
Esta falta de variedad en cuanto al sonido
fue, muy probablemente, la causa de su desaparición, ya que pronto empezaron a
producirse instrumentos con muchas más posibilidades como la GAITA,
que tenía la ventaja de ser el propio instrumento quien creaba el pedal y
las melodías.
En cuanto a su tamaño, todos los ejemplos
observados son grandes (extrapolando las dimensiones de la talla a un tamaño
real, podríamos hablar de entre 45 y 50 cm. de longitud y un diámetro de unos
20 centímetros)...
... excepto el que aparece representado en la IGLESIA DE SANTIAGO (A Coruña), mucho más pequeño.
PALAS DE REI
- REPRESENTACIÓN DEL DOLIO EN SANTA MARÍA DE MARZÁ
... excepto el que aparece representado en la IGLESIA DE SANTIAGO (A Coruña), mucho más pequeño.
A CORUÑA - DOLIO EN LA IGLESIA DE SANTIAGO...
A lo largo del
Románico jacobeo lo encontramos en varias ocasiones: en el Camino Francés, en Lousada (Ermita de San Román). En el Camino Portugués, en Bembrive (Iglesia de Santiago),
CENLLE – SANTA MARIÑA DE ESPOSENDE,...
... Moaña (Iglesia de San Martiño), Rebón (Iglesia de San Pedro) y LEIRO – CANECILLOS DE SANTO TOMÉ DE SERANTES.
En el Camino Mozárabe o Vía de la Plata, en OURENSE – CANECILLO DEL TORNALLUVIAS DE SANTA BAIA DE BEIRO.
... Moaña (Iglesia de San Martiño), Rebón (Iglesia de San Pedro) y LEIRO – CANECILLOS DE SANTO TOMÉ DE SERANTES.
En el Camino Mozárabe o Vía de la Plata, en OURENSE – CANECILLO DEL TORNALLUVIAS DE SANTA BAIA DE BEIRO.
En el Camino Inglés, en BETANZOS - MARTIÑO DE TIOBRE; en A CORUÑA - IGLESIA DE SANTIAGO, visto anteriormente.
En el Camino Primitivo, Lugo (Capilla del Pilar de la Catedral de Santa María); en el Camino de Bayona a Burgos, en Miñón de Santibáñez (arquivolta de la Iglesia de San Pedro) y en Monasterio de Rodilla (Ermita de Nuestra Señora del Valle); y en las variantes de la Ruta de la Costa, en Escalada (arquivolta de la Iglesia de Santa María) y en Moarves de Ojeda (capitel de la portada de la Iglesia de San Pedro).
En el Camino Primitivo, Lugo (Capilla del Pilar de la Catedral de Santa María); en el Camino de Bayona a Burgos, en Miñón de Santibáñez (arquivolta de la Iglesia de San Pedro) y en Monasterio de Rodilla (Ermita de Nuestra Señora del Valle); y en las variantes de la Ruta de la Costa, en Escalada (arquivolta de la Iglesia de Santa María) y en Moarves de Ojeda (capitel de la portada de la Iglesia de San Pedro).
Todos los
ejemplos, excepto aquellos en que se indica lo contrario, se encuentran
en canecillos. Así mismo, todos ellos datan de la segunda mitad del s.
XII inicios del s. XIII.
Encontraremos otros ejemplares de esta iconografía
en: la iglesia de SANTO ESTEVO DE ATÁN (Ferreira de Pantón); o Santa Baia de
Banga (O Carballiño).
REPRESENTACIÓN EN ATÁN |
También en otros templos muy distantes entre si como:
El ejemplo mejor conservado, y en el que podemos apreciar detalles
constructivos, es el de Miñón: comprobamos que la técnica del soplo es semejante
a la de las siringas y que las manos sujetaban el instrumento por la parte
superior, por el pico; vemos que contaba con dos aros laterales que actuarían a
modo de refuerzos y una pieza circular en la parte frontal, probablemente con
función ornamental.
La mayor parte de las construcciones románicas contaron con una rica
decoración escultórica y pictórica, parte de la cual ha pervivido hasta
nuestros días. Los cluniacenses, apoyaron la ornamentación de los edificios
religiosos (iglesias y monasterios) puesto que la veían útil y necesaria para
glorificar a Dios con su belleza, mientras que los cistercienses rechazaron el
fasto en las construcciones monásticas aunque no en las iglesias; así, muchos
de los templos románicos fueron enriquecidos con una escultura figurativa de
enorme valor didáctico, conocida por numerosos estudiosos como la Biblia de los
indoctos.
A través de la misma el artista pretendía enseñar, por lo que no debe
extrañarnos que, sobre todo, prime la intención simbólica y moralizante:
arquivoltas y capiteles muestran habitualmente figuras nimbadas para
representar a los santos que, ya en el Paraíso, disfrutan de la Luz eterna; en
otras ocasiones se alude a las virtudes que todo buen cristiano debía tener y
que eran citadas en el Antiguo o en el Nuevo Testamento, como la paciencia
encarnada por Job, o la fe de Abraham. Pero si esto sucedió con las escenas
beatíficas, las que contenían figuras grotescas, acróbatas retorcidos, animales
amaestrados y danzarinas, muy pronto aparecieron mezcladas con las imágenes
religiosas a las que realizaban un contrapunto profano y, con frecuencia,
procaz, basado en el entretenimiento corporal, la diversión y la fiesta.
Lógicamente, éstas no ilustraban ningún texto bíblico ni moralizante sino que
se basaban en la vida misma: las figuras representadas “…danzan y hacen música
no para Dios sino para el pueblo o la corte terrenal; su ambiente es el de las
ferias y ese mundo de placeres profanos de donde nacen la avaricia y la
lujuria”; precisamente, estos dos pecados, junto con la gula, serán los más
representados en los programas iconográficos, siendo condenados en el capitel o
canecillo contiguo con el castigo correspondiente. Presentando una gran
homogeneidad, independientemente de la zona geográfica en la que aparezcan
tales motivos, la avaricia, asociada con la traición de Judas que vendió a
Cristo por dinero, se muestra como un hombre desnudo, obligado a soportar el
peso de una bolsa llena de monedas colgando de su cuello;...
...la lujuria es
representada como una mujer cuyos pechos son devorados por serpientes, clara
alusión a la figura de Eva quien, sucumbiendo a la tentación del diablo (la
serpiente), era señalada tradicionalmente como responsable de la llegada del
pecado al mundo; en cuanto a la gula, aunque podemos encontrar algunas
excepciones, lo más habitual es que se asocie con el vicio de la bebida, siendo
su castigo el tener que cargar con un pesado tonel. Esta estandarización es la
causa de que ciertos elementos de determinadas escenas en las que intervienen
músicos, contorsionistas y bailarinas se interpreten erróneamente, y se
confunda la alusión al vicio de la bebida.
INFORMACIÓN RECOGIDA DE LOS SIGUIENTES ENLACES
Je suis très intéressé par cet instrument, car il est extrêmement représenté sur les modillons romans des églises du XIIème siècle, non seulement en Galice, mais également en Castille et Léon, et hors d'Espagne, dans les Landes, en Gironde. (possiblement ailleurs). Il y a un très beau modillon représentant un joueur de dolio sur l'abside de l'église de mon petit village, Saubrigues, dans les Landes. La question est : ces modillons ont-ils été sculptés par des artisans galiciens, ou était-ce une forme de mode à cette époque médiévale ? Je n'ai pas de réponse à ce jour, et les indices sont rares. Si vous désirez m'écrire : memoiresdici@outlook.fr - Je comprends le castellano. Merci.
ResponderEliminarDans les liens que j'ajoute à la fin de la publication, vous trouverez plus d'informations sur ce curieux instrument de musique et sa représentation dans les temples. Salutations et merci pour le commentaire!
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