GALICIA PUEBLO A PUEBLO: SANTA MARÍA DE ROZAVALES, MONFORTE DE LEMOS

La iglesia de la parroquia de Santa María de Rozavales no figura entre los elementos más señalados del patrimonio del municipio de Monforte y su aspecto exterior no llama la atención, pero su valor histórico puede ser considerablemente mayor de lo que se supone. Según el filólogo y escritor Gonzalo Navaza, el topónimo Rozavales es una adaptación gallega de Roncesvalles y le fue dado a la iglesia monfortina y a la parroquia donde se encuentra (que anteriormente se habían llamado Santa María de Salvadur) por decisión del rey Alfonso IX. El cambio de nombre, afirma, se produjo cuando la iglesia fue donada a la Orden de Roncesvalles, una orden militar y monástica promovida por la catedral de Pamplona y el rey Sancho III de Navarra que tenía como objetivo prestar ayuda a los peregrinos de los Caminos de Santiago. Afonso IX, que tenía buenas relaciones con el rey de Navarra, encomendó la parroquia a la Orden de Roncesvalles para que abriera en ese lugar un hospital de peregrinos, es decir, un albergue.

Los muros exteriores de la iglesia de Santa María de Rozavales han estado totalmente esgrafiados, aunque ahora sólo quedan algunos restos. Según Mar López Sotelo reconocida experta en esgrafiados, los esgrafiados son una prueba más de que Santa María de Rozavales ha estado en una ruta del Camino de Santiago pues, los esgrafiados se extienden a través de la ruta del románico y la técnica fue extendida por los peregrinos a Santiago que realizaban esgrafiados en casas a cambio de alojamiento y comida. Se generó así un estilo de enlucimiento de edificios que ha creado un conjunto de obras de arte al aire libre.

Hay muchos ejemplos de esta técnica en Galicia, la Península Ibérica y Europa con diferentes motivos decorativos. Son muy abundantes en la Ribeira Sacra: (Este esgrafiado de Rozavales, Monforte de Lemos; Praza da Torre, Castro Caldelas; Casa do Carteiro, Quiroga; "O Camiño das Estrelas" en Rairos, A Pobra do Brollón; San Lourenzo de Barxacova, Parada de Sil; Seoane Vello, Montederramo; "A Pausa" en A Pena, Paradela; Pantón de Arriba, Pantón; "Estrelario" en Gonzar, Portomarín; Casa do Camiñas (Taboada) o el de la iglesia de SANTA MARÍA DE PEDRAZA, Monterroso (enlace a nuestra publicación)), y se han puesto en valor desde el año 2017 con un proyecto de consolidación, conservación y creación de nuevas propuestas contemporáneas para la decoración mural.