La iglesia de Cadoalla se encuentra en la etapa 4 de la Vía Künig, camino bimilenario variante del Camino Francés que pasa por la ciudad de Lugo. Recibe su nombre del monje alemán Hermann Künig, autor de la guía de peregrinos medieval que recoge este itinerario a Santiago.
Este recinto sagrado, o del Santo, funciona como iglesia parroquial durante todo el año pero es también un conocido santuario llamado del Ecce Homo, que celebra su festividad el 14 y 15 de septiembre. En estas fechas, llegan cientos de devotos que, en general, se ofrecen por sí mismos, o para conseguir alguna intercesión para otras personas que no pueden venir al santuario, normalmente por alguna enfermedad. Entre las peticiones más importantes que se llevan a cabo en este santuario, podemos destacar las de enfermedades humanas y de animales, sobre todo del ganado vacuno y porcino.
El santuario fue fundado en el año 1727 por el cura párroco D. Xosé Valcárcel Quiroga, quien también compró la imagen del santo que hoy en día la podemos ver en el testero sobre una peana, pagando la mitad de su coste en misas y la otra mitad en dinero.
A lo largo del tiempo, sufrió muchas
reformas, algunas de las más recientes conocidas gracias a los libros de
fábrica. Así, por ejemplo, sabemos que el reloj de sol de la torre fue colocado
en 1815; el camino hasta iglesia construido entre 1819 y 1822, con un coste de
7600 reales, o incluso que se invirtieron 1900 reales en el año 1832 en romper
las piedras ubicada delante del santuario para así ampliar el espacio y
permitir que los devotos pudiesen andar de rodillas y cumplir sus promesas.
Según Elías Valiña, es de amplias
proporciones. Preside el frontis una robusta y esbelta torre, adosada a los
muros de la nave, sobre cuatro pilares con arcos de medio punto.
Los restos de la antigua iglesia románica, de finales del siglo XII o principios del XIII, se limitan a la parte sur del templo, concretamente la sección más oriental del muro meridional de la nave lateral. El material utilizado en el muro es la piedra caliza revocada en cal. El lienzo se rasga con una aspillera de amplio derrame interno. La parte superior del paramento se corona con un total de siete canecillos lisos de labra tosca que sirven de apoyo a una amplia cornisa de perfil rectangular.
Como curiosidad, en esta iglesia podía ser
visitado el hermoso BELÉN
DOS ANCARES, pero debido a sus dimensiones actuales, su creadora (Olimpia
León Cobo con la colaboración de la Asociación Zoela), tuvieron que trasladarlo
a la Avda. de Navia nº3 en Becerreá. Totalmente ambientado en el día a día de antaño de las aldeas, en él se
puede observar cómo eran las tareas agrícolas y ganaderas, como el sembrado del
cereal o el cuidado de animales domésticos. También se pueden contemplar las
pallozas, construcciones típicas de la comarca. Así, además del castillo de
Herodes, preside el belén un poblado de pallozas construidas en piedra y a
mano.
Foto de la página de facebook: BELÉN DOS ANCARES |
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https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/1294517.pdf
https://viakunig.eu/tramo-04-becerrea-baralla/
http://www.xoanarcodavella.com/2012/10/igrexa-de-san-pedro-de-cadoalla.html
https://www.galiciadigital.com/opinion/opinion.28678.php
http://www.concellobecerrea.es/portal_localweb/RecursosWeb/DOCUMENTOS/11/0_368_1.pdf
https://www.romanicodigital.com/sites/default/files/pdfs/files/LUGO_Cadoalla.pdf
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