Las noticias sobre esta iglesia son muy escasas, pero se sabe que su
fundación es muy antigua, ya que figura en la donación que hizo San Pedro de Mezonzo al MONASTERIO DE SANTA BAIA DE CURTIS,
restaurado por él hacia el año 995, en la que incluyó la parte que poseía en la
parroquia de "Sanctae Mariae de Virinis". Entre 1237 y 1293 se
incorporó al MONASTERIO
DE SANTA MARÍA de MONFERO por medio de donaciones de particulares,
quedando ligado a su historia. A partir de este momento se produce un silencio documental,
hasta que Carré indica que fue de presentación del conde de Maceda.
La iglesia de Santa María de Verís consta de una sola nave y un ábside
rectangular de grandes proporciones. Ha sufrido varias reformas y ampliaciones;
la última, a principios del s. XX con la colocación de la espadaña grande que
luce hoy. Por debajo de la espadaña, se encuentra la esfera de un RELOJ.
En el frontal, por encima de la puerta, hay una hornacina con
la imagen de la Virgen.
El ÁBSIDE se eleva sobre un zócalo escalonado.
En el testero
quedan vestigios de una ventana rematada en arco de medio punto, cuya rosca
probablemente fuese sostenida por dos columnas acodilladas. Actualmente, sólo
quedan las huellas del vano y los cimacios e impostas de las que arrancaba el
arco que la coronaba, que se decoran con un ajedrezado de cuidada ejecución.
Sobre esta ventana se encuentra otra posterior, pero en este caso es adintelada
e igualmente está tapiada.
En el piñón se encuentra una CRUZ ANTEFIJA de bello diseño, aunque
don Francisco Vales la califica de rara, no sólo porque no se conserva ninguna semejante
en las parroquias cercanas, sino porque incluso no se recoge ninguna parecida
en el extenso estudio que Castelao dedicó a las cruces de piedra en Galicia. La
de Verís presenta los brazos casi iguales, cortada por un aspa y todo ello
inscrito en un cuadrado.
Bajo las cornisas aparecen CANECILLOS de diversa decoración: de
proa, nacela, doble rollo con una poma, entre los que vemos un posible DOLIO. En el interior de la
sacristía incluso se reutilizaron algunos procedentes de la nave que habían sido
retirados al realizar obras.
En el piñón de la nave, sobre el ROSETÓN, se colocó una pequeña
espadaña moderna.
Los muros laterales evidencian la reconstrucción sufrida. En ambos
aparecen dos recios contrafuertes entre los que se sitúan las puertas.
El
dintel de la sur tiene, en su parte inferior, tres arcos recortados, mayor el
central, mismo modelo que la parte inferior del tímpano de la puerta sur de MEZONZO.
Sobre la puerta se abre una saetera y, sosteniendo la cornisa antigua, aparecen
canecillos con diferente decoración.
Similar es el lado norte de la nave, donde no solo el extremo occidental
está reconstruido, sino también el paramento que está sobre la puerta también
moderna.
Los canecillos se volvieron a colocar en su lugar, uno representa la cabeza
de bóvido y junto a este, otra posible representación del DOLIO.
Pese a las reformas sufridas por el edificio, han quedado elementos que permiten
llevar a cabo un análisis de la obra medieval. Los soportes del arco triunfal presentan
semejanzas estilísticas y formales con capiteles de iglesias cistercienses, especialmente OSEIRA, MEIRA
y SOBRADO (enlaces a nuestras publicaciones). También se relaciona con la cercana iglesia de SANTA MARÍA DE MEZONZO,
con la que comparte el modelo de basas y algún capitel. Además, las dimensiones
de Santa María de Verís, especialmente del ábside, no son las habituales dentro
del grupo de iglesias románicas de nave y capilla únicas, ya que son demasiado
grandes. En cuanto a la fecha de construcción, considerando sus semejanzas con
los templos señalados, Verís puede datarse alrededor de 1225.
Indicar, que durante unas obras de acondicionamiento del atrio, se optó
por trasladar el SEPULCRO ANTROPOMORFO que allí se encontraba, a la que
fuera casa rectoral situada enfrente, hoy una vivienda particular.
Soportes de las cruces que formaron un Vía Crucis en los muros del atrio. |
Su
estructura presenta una plataforma con tres gradas cuadrangulares en escalón,
pedestal con forma prismática amplia con remate de moldura de bocel. El varal
se inicia con un cuadrado enmarcado, sigue en sección octogonal adelgazada en
altura y remata con collarín cilíndrico.
El capitel exhibe dos cuerpos, el bajo
cilíndrico liso y el alto de orden jónico decorado con cabezas aladas de
angelotes en las caras y volutas en las esquinas, ábaco de caras redondeadas.
Sobre este una cruz de sección octogonal con extremos abiertos en flor de azucena.
Muestra en el anverso a Cristo crucificado con cartela alta de INRI, cabeza
inclinada a la derecha, corona de espinas, manos abiertas, piernas flexionadas
y amplio paño de pureza.
En el reverso la Virgen de los Dolores con manos
juntas en oración, tocada con largo manto desde la cabeza a los pies, colocada
sobre una peana con tres angelotes alados.
No muy lejos de la Iglesia, podemos admirar un atractivo salto de agua llamado FERVENZA DO ZARZO (ver en este enlace) o de Verís.
INFORMACIÓN RECOGIDA DE LOS SIGUIENTES ENLACES
ARTE ROMÁNICO EN EL GOLFO ÁRTABRO Y EL ORIENTE CORUÑÉS (pdf)
Los Cruceiros de la Comarca de Betanzos (pdf)
VISITA OTROS
SORPRENDENTES LUGARES DEL MUNICIPIO DE IRIXOA EN ESTE ENLACE, CON UN MAPA PARA LLEGAR A CADA UNO DE ELLOS.
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