ERMITA DE CASTROBUXÁN, VIMIANZO

Cerca de la CAPILLA DE NUESTRA SEÑORA DE LA CONCEPCIÓN, se aprecian los restos de un antiguo CASTRO, que justifica el topónimo de Castrobuxán, lugar donde se encuentra.

Se yergue a 120 metros de altitud sobre una colina que domina el río Grande. La fuerte pendiente desde el río por su parte oeste, hace muy difícil el acceso. La muralla que lo rodea es bien apreciable. Se encuentra lleno de maleza y eucaliptos, con el consiguiente peligro de conservación. No se realizaron excavaciones arqueológicas en el lugar.

PUENTE DE FURAQUEIRA SOBRE EL RÍO GRANDE, A LOS PIES DEL CASTRO

El conjunto está formado además de por la ermita: un cruceiro, un hórreo y una fuente sagrada, que está situada en un lugar separado de la capilla.

A pesar de que la capilla mayor y la nave datan del año 1756, mandada construir por el arzobispo Bartolomeu de Raxoi en su visita en el año 1954, el conjunto ya existía en el siglo XVII.

En su interior guardia un interesante retablo con relieves barrocos y la imagen de la Virgen de la Concepción, de estilo renacentista y del siglo XVI.

Sobre una plataforma cuadrangular de tres escalones, se yergue el CRUCEIRO de Castrobuxán. El varal octogonal, que comienza cuadrado, surge de un pedestal cuadrangular finalizado con chaflanes. La cruz se sostiene en un capitel decorado con cabezas de ángeles con alas y volutas.

En el anverso de la cruz se representa a Cristo crucificado, con tres clavos y la cabeza hacia delante.

En el reverso, una Piedad en la que la Virgen María sostiene en su regazo a Cristo muerto y sujeta con la mano su cabeza.

Y por último, la FUENTE SAGRADA, una fuente barroca del siglo XVIII, situada en un lugar aislado en el medio del monte. La fuente está a unos 500 metros de este santuario, al oeste. Para acceder a la fuente se puede ir por uno viejo camino que pasa a un lado de la muralla sur del castro. A pesar de ser un camino público, hay que atravesar la cancela de la única casa del lugar (que pone propiedad privada, donde podemos observar un bonito hórreo) y continuar por ese camino hasta que llegamos a la fuente.

Consta de un panel pentagonal finalizado en una cruz pétrea resarcida y dos pináculos a cada esquina. En su parte central presenta un templete finalizado en un arco de medio punto que antes acogía una imagen pétrea de María, hoy desaparecida. En sus dos lados, decoran la fuente cuatro interesantes volutas en disposiciones contrapuestas.

En esta visita no sabíamos de la localización exacta de la fuente, sólo advertimos esta moderna pegada a la ermita 

Según el investigador Xosé María Lema, en su libro “Camino secreto de Santiago”, este pudo ser otro lugar de importante culto a nivel comarcal.

La ermita queda cerca de una vieja vía de comunicación que comunicaba, siguiendo el curso del río Grande, Vimianzo con la ría de Camariñas. Pero también, según Xosé María Lema, pudo haber sido punto de parada de peregrinos que se dirigían a Santiago procedentes del puerto de Cereixo o de Camariñas.

Hasta mediados del siglo pasado en este lugar se celebraba una gran fiesta el lunes de Pascua. Hace unos años, concretamente desde el 2009, un grupo de vecinos de la parroquia ha recuperado la romería campestre de antaño, celebrada el 14 y 15 de agosto, aprovechando la recuperación de la capilla y el acondicionamiento del entorno.

  

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