GALICIA PUEBLO A PUEBLO: CONJUNTO RELIGIOSO DE MARRUBIO, MONTEDERRAMO

El edificio religioso más relevante de Montederramo es, sin duda, el monasterio cisterciense de Santa María, ubicado en la capital del municipio. Pero también debemos destacar este conjunto religioso de Marrubio, un emplazamiento eremítico que acoge la pequeña capilla dedicada a San Juan, un magnífico cruceiro y dos petos de ánimas, que hoy, sólo conservan las hornacinas.

La Capilla, muy austera, se construyó bajo la advocación de San Xoán, aunque se venera a San Antón que se celebra el 13 de junio.

Tiene planta rectangular, cubierta a dos aguas y un pequeño atrio de acceso. Está rodeada de un muro de mampostería con una entrada al frente. Destaca su espadaña sin campana, de un solo vano con arco de medio punto y rematada con una cruz realizada en piedra.

El CRUCEIRO DE MARRUBIO es un ejemplar curioso en Galicia. La estructura que lo protege y posiblemente permite la conservación de cierta policromía en esta pieza escultórica, está más próxima a considerarse un pequeño baldaquino al aire libre. Esto no impide otra lectura, de que esta estructura de piedra con el tejado, sea la representación del Calvario de Jesucristo. Otro tema interesante es, lo que podemos denominar el pequeño PURGATORIO DE MARRUBIO. A partir del siglo XVI, el catolicismo promulga que hay un lugar de castigo temporal que nos impide llegar al Cielo a los pecadores. Para conseguir purgar más rápido los pecados, se ponía a disposición de los creyentes un Peto de Ánimas donde depositar las limosnas. En el caso de Marrubio faltan las figuras de los santos.

Lo que se tiene claro es que fue realizado en 1778, con la figura de Jesucristo mirando hacia el oeste, bajo la atenta mirada de San Antón, que lo sostiene por la cintura. Bajo los pies de Cristo, una calavera y dos tibias.

En el reverso, está representada la Virgen María.

Lo más curioso, aparte del tema de la policromía, aparece en la base del varal del cruceiro, con la presentación de varias figuras: escaleras, clavos y tenazas. Esto representa la bajada de la cruz del cuerpo de Jesucristo.