Fue fundado por el Papa Alejandro VI en 1494, en el lugar donde tiempo
atrás existió una capilla dedicada a Santa Bárbara.
El convento de clausura, que fue ampliado en los s. XVII y XVIII, se abre
a la plazuela de su mismo nombre, un pequeño espacio urbano lleno de magia.
Se puede observar sobre la puerta principal, un interesante relieve
gótico del S. XIV donde se representa el Juicio Final.
Empotrado sobre uno de los arcos del vestíbulo, sobresale un tímpano
donde se representa a la Virgen con el niño.
Declarado Conjunto Histórico en
1971, actualmente está habitado por de la Madres Clarisas, monjas a las que
según la tradición,
las novias, antes de la boda, han de llevar una docena de huevos, con su clara,
a algún monasterio vecino de clarisas. Las religiosas pedirán expresamente a
Santa Clara la gracia del buen tiempo, sin lluvia para el día del enlace.
Santa Clara no es, en realidad, patrona del buen tiempo, es un patronazgo
folclórico, creado por sus típicas ofrendas de huevos, cuyo origen se desconoce.
Costumbre, que también el día de mi boda se ha seguido, acompañándonos el buen tiempo.
INFORMACION RECOGIDA DEL SIGUIENTE
ENLACE
*LUGAR de Adoración Eucarística 24 horas.
ResponderEliminarGracias Antonio por el apunte!
EliminarJosé Antonio
ResponderEliminarGracias por el comentario