La carretera que une CEDEIRA con CARIÑO cruzando la
imponente SERRA DA CAPELADA,
nos irá mostrando, una serie de miradores de esta inigualable costa Ártabra a
cada cual más impresionante.
El primero que nos topamos nada más acceder a este espacio natural de la
sierra da capelada, es el de CHAO DE MONTE.
Desde aquí, si el embrujo de
la espesa niebla tan pródiga en estos lares nos lo permite, tendremos una
inmejorable vista del pueblo de SAN ANDRÉS DE
TEIXIDO, donde entre un pequeño grupo de casas blancas se asienta su popular
SANTUARIO DE PEREGRINACIONES, ¡al que todos alguna vez nos tocará ir!,
porque “a Santo André de Teixido vai de morto quen non foi de vivo”, (va
de muerto quien no fue de vivo).
La visión de pueblo sobre un gran deslizamiento cuaternario que todavía
sigue activo; los indescriptibles acantilados que caen abruptamente en vertical
al océano en la Punta Robaliceira (Cariño);o el islote Gabeira, asomando de las
profundidades marinas, hechiza.
Un panel informativo nos da cuenta de este extraordinario fenómeno
geológico, donde la predominación de rocas básicas y ultrabásicas con un fuerte
contenido en hierro y magnesio, determinan la particular forma del relieve, tan
espectacularmente accidentado en esta Sierra da Capelada, como en el del
cercano Cabo Ortegal.
Sin habernos dado cuenta, apreciamos que nos encontramos rodeados de un BOSQUE
PETRIFICADO, donde afloran múltiples rocas con distintas y hermosas formas
y también, de una buena cantidad de animales en libertad, que nos deben
vislumbrar colonizadores de su espacio natural.
A nuestras espaldas, en la lejanía podemos otear una pequeña parte de la
ría de Cedeira y la villa.
Pero será adentrándonos con cuidado entre el bosque
pétreo hacia el Océano, donde se presenta otra de las panorámicas más bella;
espectacular y sobrecogedora de este entorno. Un profundísimo acantilado, en
las que distinguimos unas cuantas calas rocosas inaccesibles desde tierra.
Igualmente, debemos fijarnos en el AMILLADOIRO
que se alza en las proximidades. Bajo esta cruz los peregrinos de camino a
Teixido, depositan una piedra, conformando con el paso del tiempo una enorme
pila rocosa, tradición que se acostumbra a realizar en otros puntos del Camino
de Santiago.
En el enclave se ha habilitado una pequeña ÁREA RECREATIVA, en la
que si el tiempo acompaña, podremos disfrutar de una comida campestre.
VISITA OTROS
SORPRENDENTES LUGARES DEL AYUNTAMIENTO DE CEDEIRA EN ESTE ENLACE.
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