Yacimiento de especial interés, donde se aprecian claramente vestigios
del foso y una potente muralla, que en algún punto superó los 8 metros de
altura.
Estas defensas no son habituales en los yacimientos castreños, lo que
demuestran, que este castro en su día fue un poblado importante, probablemente
más extenso de lo que se aprecia en la actualidad.
Lo normal en la construcción de un castro, era levantarlo en un
emplazamiento de difícil acceso, como en lo alto de un monte o al borde de los
acantilados. Sin embargo, este castro está localizado en pleno valle, para
poder aprovechar las tierras de cultivo y el dominio de la zona. Para
defenderse, tuvo que fortificarse con estas enormes barreras.
El eje mayor del recinto ovalado tiene 110 metros y se orienta de norte a
sur, mientras que su eje menor es de 65 metros y va de este a oeste.
De los datos aportados en la primera excavación de 2010, el yacimiento se
data entre los s. II y I a. C. En la cata se descubrieron restos de tres
construcciones circulares en muy buen estado de conservación, aunque se piensa,
que el yacimiento está lleno de lo que fueron viviendas de la época. También se
encontraron más de 500 fragmentos de cerámica y piezas de hierro.
Este castro está considerado por los expertos una joya dentro del
noroeste peninsular. Se cree que se trata de un castro del mismo estilo que A
Cidá de Borneiro, en Cabana de Bergantiños.
A Cidá de Borneiro, en Cabana de Bergantiños. |
Alrededor de este castro se crearon múltiples leyendas a lo largo de los
años, y una de las más populares, hablaba de la existencia de un túnel que
conectaba el yacimiento con el CASTILLO
DE VIMIANZO.
En nuestra última visita (año 2018) se estaban realizando nuevas excavaciones
que permitieron sacar a la luz, dos viviendas de planta circular descubiertas
en una de las catas realizadas en el año 2010.
Se localizaron dos construcciones de gran tamaño, y medio millar de
fragmentos de cerámica en este castro datado en la segunda Edad de Hierro,
entre los siglos III e I antes de Cristo.
El Concello de Vimianzo sigue poniendo mucho empeño en la puesta en valor
de este enclave continuando en este 2019 con las excavaciones, en las que se
han topado con vestigios de dos construcciones a mayores de las que ya se
conocían. De ahí que, aunque todo eso hay que asentarlo a nivel científico,
invita a pensar que todo el recinto amurallado está repleto de edificaciones,
porque era lo habitual en estos asentamientos y porque en unos pocos metros
cuadrados ya han comprobado que todo va en esta línea. Y no son solo muros de
piedra lo que han empezado a dejar a la vista las piquetas y las palas, sino
que se han recogido ya bastante restos de cerámica, incluso alguna decorada de
época castreña tardía, lo que también apunta en el sentido de una riqueza
material, indicio de un desarrollo social avanzado. Las previsiones de los arqueólogos, es la de dejar la mitad del castro al
descubierto y la otra mitad tal y como está, para poder así “admirar cómo fue
afectando a las construcciones el paso del tiempo”.
INFORMACIÓN RECOGIDA DE LOS SIGUIENTE ENLACES
No hay comentarios:
Publicar un comentario