El parque tiene la forma de un triángulo cuyos vértices y fronteras
serían As
Pontes, Pontedeume
y Monfero,
pero comprende también los ayuntamientos de Cabanas y A
Capela, todos ellos de la provincia de A Coruña.
Tiene establecidos cuatro portales de acceso sin comunicación entre
ellos, alguno de los cuales, igualmente espectaculares, hemos tratado en otras
entradas de este Blog (ver A
Capela o Monfero).
En esta ocasión recorremos el más visitado, el que desde Pontedeume fija
como destino el Monasterio de Caaveiro, recientemente rehabilitado.
En el camino podemos observar la FUENTE-LAVADERO DE OMBRE, construida en el año 1900 por el alcalde-presidente D. Fernando Álvarez, como así revela una inscripción en el frente.
El nacimiento del agua brota entre rocas detrás de la fuente, trayendo un
agua natural excelente (no tratada sanitariamente)
Las laderas inclinadas sólo permiten esta entrada siguiendo el curso del
río Eume a través del coto pesquero de Ombre, a diez kilómetros de Pontedeume.
Aquí se encuentra el ÁREA RECREATIVA DE XUNQUEIRA DE ARRIBA,
magnífico entorno desde el que comenzar el recorrido y perfectamente habilitado
para una merienda campestre.
Poco más adelante, se sitúa el edificio del Centro
de Interpretación del PARQUE
NATURAL DAS FRAGAS DO EUME, en el que informarse sobre las
características de este y las rutas que discurren por él. En los meses de
julio, agosto y septiembre, a partir de este centro de recepción de visitantes,
se cierra el tránsito de vehículos. En esos meses, desde los aparcamientos que
están al comienzo del parque, se puede coger un microbús gratuito que hace la
ruta hasta el monasterio cada 30 min.
Desde el refugio de pescadores y el PUENTE COLGANTE DE CAL GRANDE
parten los itinerarios a través del bosque.
En un divertido ejercicio de balancín (no apto para personas con
vértigo), salvamos el ancho cauce fluvial del río Eume, y nos situarnos en la
senda de pescadores que nos permitirá realizar el recorrido por la orilla
opuesta.
La mejor forma de conocer el parque es a pie, así, si uno sabe ver, quizá
descubra a los juguetones duendes que habitan en él.
Las Fragas do Eume es uno de los bosques atlánticos de ribera mejor conservados
de Europa, uno de los escasísimos bosques de este tipo del continente y último
refugio de una gran variedad de especies animales y vegetales amenazadas.
Especial interés tienen los helechos, provenientes de la época terciaria,
cuando los dinosaurios aún dominaban la tierra. Fue declarado Parque Natural
en 1997.
Dentro de sus 9.000 hectáreas de extensión viven menos de 500 personas,
lo que da una idea del estado virgen de estos exuberantes bosques que siguen el
curso del río Eume.
La LEYENDA dice que cuando Dios creó los ríos, mandó nacer a tres
juntos en la Serra do Xistral, (Eume, Landro y Masma), prometiéndole un hombre
todos los años al primero que llegase a su desembocadura. Después de su
nacimiento pactaron descansar un rato, pero únicamente el Eume cumplió su
promesa, al comprobar la traición, enfurecido, emprendió la marcha cruzando los
valles y montañas de A Capela, labrando un cañón agreste de aguas bravas
consiguió llegar el primero, por ello todos los años el río se cobra la vida de una persona.
Tras andar unos 3 km aproximadamente, nos topamos con el PUENTE COLGANTE DE FORNELOS, algo más pequeño que el anterior, pero igualmente encajado en un entorno de
extraordinaria belleza.
A veces la vegetación es tan tupida que apenas deja pasar la luz.
Pero este bosque umbrío y secreto es generoso como sus aguas, fuentes y
cascadas.
Las aguas del Eume, ahora mucho más agitadas, anuncian otro maravilloso rincón.
Aquí, la bucólica presa dibuja un hermoso tapiz, donde su torrente ambiciona
todo el protagonismo del cuadro.
En los pequeños canales de este tipo de presas bajas, llamadas CANEIROS,
se colocaban las redes para la pesca. A pesar de que hoy en día sólo está
permitida la pesca con caña, tradicionalmente se usaron estos caneiros para
capturar salmones de forma masiva.
Los caneiros del Eume pertenecieron a la Casa de Alba, y el traslado de
los salmones a Madrid se realizaba por correo urgente a caballo.
Aquí no hay verde, aquí hay paisajes de mil verdes. Robles, chopos, fresnos, alisos, más de 20 especies de helechos y 200 de
líquenes se dan aquí. Es necesario mencionar las 103 especies de aves, 41 de
mamíferos y 8 de peces. Especies endémicas de invertebrados y reptiles como la
rana ibérica.
Y escondido en el corazón del bosque, el monasterio benedictino de SanXoán Caaveiro, un antiguo cenobio con más de 10 siglos de historia y unas
vistas espectaculares de esta "fraga" mágica.
VISITA OTROS
SORPRENDENTES LUGARES DEL AYUNTAMIENTO DE PONTEDEUME EN ESTE ENLACE,
CON UN MAPA PARA LLEGAR A CADA UNO DE ELLOS.
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