GALICIA PUEBLO A PUEBLO: SANTA MARÍA DE MELIAS, O PEREIRO DE AGUIAR

En nuestra primera xuntanza de este 2019, elegimos para alojarnos una bonita casa en el municipio de Pereiro de Aguiar.

Aprovechamos que en las cercanías de esta había una panadería tradicional con horno de leña, donde además de hacer un riquísimo pan y unas sabrosas empanadas (hacía tiempo que no comía una con una masa tan rica), mostraba en sus muros una hermosa cruz, así como un estupendo escudo de armas,

Frente a la panadería se abre una plaza presidida por un sencillo CRUCEIRO, donde también se levanta la monumental iglesia barroca de Santa María de Melias.

El templo lo califica de "magnífico" Madoz en su diccionario, pues sorprende por sus enormes dimensiones en este medio rural. Fachada de tres cuerpos enmarcada por dos torres, una de ellas inacabada. Los laterales están sobriamente decorados con motivos geométricos, solamente una ventana en la parte inferior de cada uno de los lados rompe con la armonía del paño. En el lateral izquierdo de la fachada se alza la torre del campanario, con tres cuerpos que disminuyen en tamaño según ascendemos. En los dos primeros, cuadrados y con vanos en arcada de medio punto en cada uno de los lados, tenemos las campanas y el tercero remata en una pequeña cúpula.

Al cuerpo central se asciende por una escalinata perfectamente armonizada con el conjunto y que desemboca en la puerta principal. Esta escalinata está decorada con figuras zoomorfas.

La puerta principal está enmarcada por una moldura geométrica que la circunda. Encima de la puerta tenemos una hornacina, que guarda una muy bella imagen de la Asunción de la Virgen María.

La parte central se remata con un frontón curvo partido y con un pináculo central que da empuje vertical a la fachada. Dentro del frontón se encuentra el reloj.

La iglesia cuenta con una inscripción en la fachada, que se colocó en el siglo XVIII, dedicada al PADRE FEIJOO, fallecido hace 250 años, porque el célebre ensayista, nacido en Casademiro, fue bautizado precisamente en este templo, donde se conserva la pila bautismal en el que este hecho se produjo. También fue bautizado aquí, y un vítor en la fachada lo recuerda, el que fue obispo de Calahorra y Santo Domingo de la Calzada, Andrés Porras y Temes, nacido en este lugar en 1708. Bajo el patrocinio de este obispo se construyó, a imitación de LA BERENGUELA, la torre exenta de la catedral de Santo Domingo de la Calzada, obra del vizcaino Martín de Beratúa, en 1769, que continúa siendo la más alta de La Rioja y fue él quien confirmó al motriqués Cosme Damián de Churruca, uno de los héroes de la batalla de Trafalgar donde murió al mando del navío San Juan Nepomuceno, en enfrentamiento desigual contra seis barcos ingleses.

En el interior la nave tiene bóveda de cañón y el ábside de crucería, pudiendo contemplar tres naves siendo la central la más elevada. En la capilla del Carmen encontramos un retablo barroco del siglo XVIII de gran calidad artística con las imágenes de Nuestra Señora del Carmen, San Alberto, San Francisco de Sena y las figuras orantes de San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús.